domingo, 9 de agosto de 2015

Viaje Europa Norte - 2 - TOMAR DISTANCIA



TOMAR DISTANCIA

La teletransportación, no existe actualmente como medio de transporte de personas, o al menos eso entiendo (desconozco los resultados de los experimentos llevados a cabo en el Área 51 y demás instalaciones "secretas"). De cualquier manera el letargo en los contorsionados asientos del avión produjeron una sensación similar. Prácticamente de un segundo al otro nos encontramos haciendo combinaciones de Underground (Subterráneo) para arribar a nuestro apartamento, un par de cuadras al norte del Hyde Park.

No acumulamos una extensa cantidad de viajes, pero esos pocos, cultivaron ciertas estrategias para conocer destinos de manera eficiente y distendida. He aquí entonces una serie de tips que comparto para quienes aprecien de viajar como lo hacemos nosotros.

Arribar a las ciudades cerca del mediodía, es posible si se viaja de mañana o calculando vuelos largos. Ese horario de llegada permite a los viajeros instalarse sin problemas de check-in en su lugar de estadía y descansar del largo recorrido. Una vez recuperadas, al menos en parte, las energías será posible hacer lo que nosotros llamamos "tomarle la distancia a la ciudad". Esto consiste en salir a caminar por las zonas aledañas al hotel o departamento, sumergiéndose de a poco en las calles y la cultura. Una vez culminado este paseo, los viajeros tienen una idea más cercana a la realidad, acerca de los garabatos en los mapas entendiendo el tiempo que puede tomarles trasladarse a pie de un punto a otro en la ciudad.

Viaje Europa Norte 2015 - Prólogo



PRÓLOGO

Vacaciones, es el período de descanso que se gana el trabajador a cambio de su esfuerzo en cada jornada. En nuestro país este tiempo, resulta a través de una formula que combina la antigüedad de cada trabajador en su puesto y las horas trabajadas. Me llevó unos 10 años de trabajo y algunas vacaciones, entender que el tiempo de vacaciones no se utiliza para descansar del período que consta entre descanso y descanso. De esta manera, cree un nuevo postulado matemático que define la cantidad de tiempo que uno esta descansando en la vacaciones. Suponiendo que uno se toma tres semanas de vacaciones, como es nuestro caso en esta oportunidad, el trabajador realiza un esfuerzo doble durante ese tiempo previo al inicio de las vacaciones. Como resultado uno empieza su primer día de vacaciones el doble de cansado que tres semanas antes de comenzar el receso.

Es posible que nada de lo descrito anteriormente, tenga algo de sentido. Y quede evidenciado mi escaso conocimiento acerca de las matemáticas y la aritmética. A decir verdad es meramente una excusa por no comenzar este relato con anterioridad. No por que no lo disfrute, sino por que los momentos disponibles en viajes anteriores para relatar nuestras andanzas, fueron utilizados esta vez para descansar o dormir en el mejor de los casos. Recuperando lentamente las tres semanas previas al viaje de trabajo, organización y ansiedad.

Esta es sin lugar a dudas la razón por la cual los estrechos asientos de avión entre Buenos Aires y San Pablo, y más tarde entre la ciudad brasileña y Londres, dejaran de ser el escritorio habitual de mi uso para ser incomodísimas camas. Los viajes en tren posteriores, requirieron todos los sentidos para realizar combinaciones y chequear horarios de salida. Pero nuevamente, solo insisto en buscar excusas.

Excusas aparte, comienza el viaje.